Tan poco significa tanto.

24.05.2020

Está enfermedad es muy insistente y pesada, y es poco empática. Es verdad que en ciertos momentos te hace creer que está de tu parte o que quiere lo mejor para ti, pero para eso estás tú. Tú debes ser la que le impida ilusionarte o la que sea realista. Al fin y al cabo eres tú la que convivirás contigo misma, y no ella. Porque sí, sufrirás y te cansarás, pero conseguirás que se vaya.

Esto es una buena señal


El otro día me bajó la regla después de 9 meses con faltas. De hecho sentí dos emociones totalmente distintas, pero ambas me irradiaron de felicidad. Por una parte me sentí aquella niña en 6º de primaria que llegó a casa sabiendo que algo le pasaba. Recuerdo muy bien aquel día, porque llevaba toda mi vida viendo a mi madre con dolores de ovarios, y más tarde. a mi hermana aprendiendo a ponerse tampones. Recuerdo que me sentía mayor, con poder e incluso diferente. Nada en mi había cambiado, de hecho no había vivido ni la mitad de todas las experiencias que llevo hoy en día en mi mochila, pero me sentía madura, con cierto miedo o inseguridad, pero con la fuerza suficiente para defenderme.

Obviamente, también sentí alivio. Por un momento respiré y miré mis braguitas manchadas. En lo último que pensé fue en tener que limpiarlas y darles con jabón, estaba ilusionada e incluso relajada. Mi mente entendió que algo estaba haciendo bien, y que ya no corría tanto peligro. Me terminé de limpiar y corrí. Empece a saltar y a repetirlo por toda mi casa. Incluso le enseñé las braguitas a mi madre porque no se creía que eso pudiese ser verdad. 


No debes hacerte falsas ilusiones.


Tuvo su parte buena, aunque también su parte mala. Mi compañera de piso durante todos estos meses se asustó, tanto que me intentó hacer creer que era malo, que aquello no debía pasarme. Es verdad que estoy muy entrenada y sé hacer que se calle, porque jamás va a entrar en razón, pero a veces me creo que soy inmune y que nada va pasarme. Evidentemente es mi primera menstruación después de mucho tiempo, y es normal que sea  irregular y escasa, pero como mi compañera ya no sabe que utilizar, saca la mínima tontería. Vale, que sí, que estoy mucho mejor, pero no estoy curada.

A veces me enfado con mi familia cuando me tratan como si nada pasase, como si yo no hubiese vivido todo esto o no siguiese compartiendo piso con esta especie extraña. Siento como si no recordasen lo que soy o con lo que convivo, lo quieran ver o no sigo estando enferma. 

Luego pienso, y me doy cuenta de que yo misma hago falsas ilusiones. De una manera u otra siempre acabo creyendo que ya no me pasa nada, o que son secuelas. Por muchos días que hable con mi psicóloga y me explique que es un proceso largo, yo sigo creyendo que yo lo puedo hacer más rápido. Puede que solo sea ganas de terminar porque estoy muy cansada, pero todos sabemos que aunque te quede poca fuerza no te vas a tirar desde arriba de la montaña. Debo seguir luchando, y tú, si estás en esto, también debes. Porque sé que se puede y sé que nos lo merecemos ;))

¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar